Hablemos.... Hablemos de la vida, hablemos de la muerte, hablemos de lo que no se debe hablar, hablemos de ti, y de mi, de heridas, de batallas, de cicatrices, de historias y recuerdos. Lo que quieras, pero hablemos. Hablemos de nuestros días, de tu realidad, de lo que vives, de Dios, de amor, de lo que piensas hacer, y las cosas que haces sin pensar. Hablemos, o mejor háblame. Háblame de libros, de canciones, de películas, de lugares, de viajes. Háblame de las sombras, del café, de lo que escribes, de lo que piensas, de lo que quieres, de lo que sueñas, de nosotros, de caricias, de abrazos, de de lo que paso, de lo que supones, de lo que no paso. Háblame de pensamientos, de corrientes mares y vientos. Háblame de amor, y de odio, háblame de ganas, háblame de besos, háblame de pasión y resentimiento. Háblame de tristeza, háblame de melancolía.
Lo que quieras, sólo habla.
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