¿Que por qué me gusta?
No sé, quizá
por sus ojos marrones, a lo mejor es por la cara que pone al decirme tonta, tal
vez sea porque cuando me toca tengo la sensación de volar, volar muy alto,
hasta tocar el cielo, las estrellas o lo que haya por ahí arriba.
Si, creo
que son esos pequeños detalles, los que hacen que día a día le quiera más que
ayer, que no me canse de estar junto a el, de su voz, de sus dedos recorriendo
mi pelo, que me encantan sus besos, sus abrazos, que me encanta él. Que es la
razón por la que despertarme cada mañana, la razón de mis cientos de lágrimas,
pero también la de mis miles de sonrisas.
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